Estoy embarazada por tercera vez. Nada más enterarme de que
estaba embarazada pensé ¿Y ahora qué? Este embarazo es lo que se suele decir un
embarazo sorpresa, no fue planificado, ni buscado, pero no por ello es menos
deseado.
El frutito que se está formando viene a su casa y todos los
recibiremos con las manos abiertas. Melocotón va a cumplir 8 años y Manzanita
tendrá 5 cuando nazca su hermanito. Quizás si lo hubiésemos planificado o
hubiésemos tenido claro que queríamos tener un tercer hijo habríamos dejado
pasar menos tiempo para que se llevase menos años con sus hermanos.
La cuestión es que ha sucedido así, ha querido venir en este
momento y nos adaptaremos a ello. Sus hermanos están emocionados con la idea de
tener un bebé en casa, ellos se ven tan mayores que nos dicen que lo cuidaran.
Eso habrá que verlo, pero la intención ya cuenta.
Cuando con un predictor primero y con un Clearblue después
confirmamos que el retraso que levantó nuestras sospechas era un bebé en camino,
un cúmulo de distintas emociones pasaron por nuestras cabezas en una milésima
de segundo.
Un niño es vida, alegría y felicidad, eso siempre. Pero es
cierto que ya estábamos muy cómodos. En el último año hemos hecho dos viajes en
avión a otros países y varias escapadas dentro de España. Por no contar lo
cómodo que resulta hacer cualquier plan con los niños ya con 7 y 4 años.
Ya ni recordamos eso de llevar una bolsa con pañales, mudas
y demás accesorios. Manzanita dijo adiós a los pañales antes de cumplir 2 años
(nada que ver con el momento pañales de Melocotón, dicho sea de paso) pero ella
desde entonces ni de noche ni de día y eso da una libertad maravillosa.
Vuelta a tener que llevar mil cosas para salir, para viajar,
a no dormir las noches completas… pero todo se compensa con la alegría de tener
a un bebé en casa, de nuevo.
En mis anteriores embarazos he de confesaros que es un
estado que no he disfrutado mucho, por varias razones. La primera que soy un
poco hipocondríaca y me agobia muchísimo todo el tema de esto no lo puedes
comer, aquello tampoco. En segundo lugar que soy muy muy impaciente y 8 meses
de espera se me hacen eternos, me
encantaría enterarme del embarazo y tener ya al bebé en mis brazos. En tercer
lugar porque los embarazos me dan un hambre voraz y como, no sé cerrar el
piquito y engordo tela marinera, así que estoy deseando que pase esta época
para reencontrarme con mi yo pre-embarazo.
Pero en este embarazo me he propuesto cambiar el chic. Voy a
cuidar lo que como siguiendo las indicaciones del ginecólogo pero sin
obsesionarme con las infecciones alimentarias ni dentro ni fuera de casa y
disfrutar. Voy a aprender a disfrutar de cada momento sin impacientarme,
sintiendo como va creciendo mi frutito en mi interior. Por último no os voy a
decir que no vaya a engordar infinito, porque sé que es imposible pero no me
voy a odiar por hacerlo.
Dicho todo esto nos ponemos en modo embarazo on y os iré
contando cositas, trucos y consejos para llevar este estado lo mejor posible y
por supuesto os contaré cómo va evolucionando frutito al horno.
