El sábado por la mañana los frutitos hicieron un refrescante zumo de naranjas y limones para ellos y otro para mí con la exprimidora Panasonic de la abuela que tan fácil les resulta, y la verdad es que estaba riquísimo.
Ellos en verano disfrutan muchísimo, no solo porque se lo pasan a pie de playa, pudiendo aprovecharla cada día, bañarse en el mar, con tiempo libre para jugar, leer, hacer manualidades, bañarse en la piscina... sino que también pueden disfrutar de sus buenosabuelos maternos, a los que apenas ven en invierno.
El abuelo tiene muchas plantas y algunos árboles frutales como un granado, uno de nísperos, un limonero y un naranjo. De estos dos últimos que están bajitos Melocotón y Manzanita cogen naranjas y limones muchas mañanas para exprimirlos y empezar el día con un refrescante zumo de frutos recién cogidos. Algo que me encanta porque los cítricos tienen muchísimas propiedades beneficiosas para ellos y además estos zumos naturales están increíblemente buenos y son muchísimo más sanos que los zumos envasados.
La vida en nuestro paraíso particular es puro placer. Respirar aire puro, bañarse en el atlántico, jugar en la blanca y fina arena de la playa, pasar tiempo con la familia y amigos que viven allí, vivir rodeado de plantas y árboles y tener la posibilidad de beber los zumos con frutas directamente del árbol, son solo algunos de los muchos placeres que supone pasar el verano en nuestro querido pueblo.
Pues como os iba contando, el sábado nada más amanecer se acercaron al limonero y al naranjo con los sombreros que les regaló la buenaabuela, que por cierto estaban muy cómicos, y cogieron 2 o 3 naranjas y un par de limones y se fueron corriendo para la cocina.
Una vez allí no quisieron que les ayudara en nada, ellos ya se sienten mayores. Cuando cogieron el cuchillo para partir las naranjas y limones a la mitad casi me da algo, porque el Melocotón tiene 6 pero la Manzanita solo 3 y verla con el cuchillo me sobresaltó, pero sorprendentemente las partió a la mitad bastante bien y sin daños que lamentar (aunque ya le he dicho que mejor el tema cuchillos nos lo deje a los mayores). Normalmente es la abuela la que prepara los zumos, pero esta vez quisieron ser ellos mismos para impresionarme y ya lo creo que lo consiguieron ¡Jajaja!
¡Con este exprimidor los zumos se hacen más rápidos y quedan mucho más ricos! me decía el Melocotón. Así que tendré que echarle un ojo a la línea de exprimidoras de Panasonic en su página (cuyo enlace os he dejado al comienzo del post) o desde Amazon, para comprar una para nuestra casa de Madrid, aunque allí no serán con frutas recién cogidas del árbol y esto seguro que también se nota.
La verdad es que esta vez el resultado no pudo ser mejor y disfrutamos de nuestros zumos en la piscina con la playa de fondo ¡Puro placer!. Una maravillosa manera de empezar la mañana y coger energía para disfrutar durante todo el día. ¡Así da gusto!
¡Feliz verano!