La ecografía morfológica de las 20 semanas de embarazo, es la ecografía más importante de todas las que se hacen en el embarazo y se realiza entre las semanas 18 y 22.
Esta ecografía es fundamental para detectar posibles anomalías fetales mediante la exploración pormenorizada de los órganos y aparatos y la estimación de las medidas fetales para calcular el tiempo de embarazo y descartar retrasos de crecimiento. También se analiza el bienestar fetal valorando los movimientos corporales del feto, los movimientos respiratorios, el tono fetal, los patrones de flujo sanguíneo placentario o cerebral...
Después del minucioso análisis que se lleva a cabo en esta ecografía, si el ginecólogo detecta alguna anomalía valorará su transcendencia y actuará al respecto. Pudiendo solicitar un seguimiento más intensivo o en casos más graves orientarnos hacia la necesidad de realizar otras pruebas, como la amniocentesis.
Hace 4 semanas tuve la ecografía morfológica de las 20 semanas de mi tercer embarazo. En los dos anteriores todo había ido bien y pensábamos que esta vez sería exactamente igual.
Sin embargo en esta ocasión, a pesar de que la ginecóloga nos dijo que el feto estaba perfecto acorde al momento de embarazo en el que estaba, también nos explicó que había detectado una pequeña "anomalía" en el cordón umbilical. Nos dijo que el cordón umbilical normalmente está formado por una vena y dos arterias de idéntico tamaño entre ellas y que en este caso una de las dos arterias era más fina y aunque se percibía que funcionaba y había flujo tenía que hacer un seguimiento para comprobar que seguía funcionando y no se cerraba del todo y que el feto seguía su crecimiento normal.
Nos citó para otra ecografía de seguimiento para 4 semanas después. Aunque nos dijo que estuviésemos tranquilos, que de momento todo iba bien, que el feto estaba perfecto y todo iba como tenía que ir, que se trataba simplemente de un seguimiento para confirmar que todo seguía con normalidad y corroborar que la arteria no se cerrara o dejara de funcionar, es inevitable cierta preocupación.
Papá de frutitos es una de las personas más optimistas y positivas que conozco, es de esas personas que siempre sonríe y ve el vaso medio lleno y nunca medio vacío. Tenerle a mi lado en ese momento y en otros muchos momentos es un absoluto regalo y hace que todo se lleve mejor. A pesar de esto la preocupación estaba ahí y sé que aunque él no lo expresase tampoco salió de aquella consulta como habíamos salido de esta misma ecografía en nuestros dos embarazos anteriores.
No obstante, decidimos quedarnos con lo positivo y es que de momento todo estaba perfecto y que Plátano baby estaba perfectamente sano tal y como tenía que estar con 20 semanas de gestación.
A pesar de que decidimos quedarnos con los positivo y estar tranquilos, a la semana siguiente fuimos a otra clínica a hacernos otra ecografía morfológica de las 20 semanas, para tener una segunda opinión y saber un poco más sobre esta "anomalía" en el cordón umbilical y las posibles consecuencias que podía traer consigo.
En esta ocasión la ginecóloga no le dio ninguna importancia a este hecho, nos dijo que efectivamente se percibía una de las arterias un poco más finas pero que funcionaba perfectamente y que no tenía importancia pues el feto estaba perfecto y todo lo que se podía analizar en este momento del embarazo estaba bien. Sin embargo nos dijo que si en nuestra clínica habían considerado hacer un seguimiento, porque efectivamente una de las arterias era un poco más fina, pues simplemente se querían asegurar que este hecho no interfiriera en el crecimiento y desarrollo del feto.
Así que estas semanas, hasta ayer que fui a la ecografía de seguimiento (4 semanas después de la primera ecogafía morfológica de las 20 semanas de embarazo que nos hicieron) he estado tranquila, aunque también tenía ganas de que llegase ya el momento y ver cómo había evolucionado todo.
En la ecografía de ayer salimos muy contentos, pues Plátano baby sigue perfectamente, acorde a lo que se puede analizar a través de ecografía en esta semana de embarazo. Sus órganos están perfectos, el corazón, el cerebro... Además está creciendo como debía y ya pesa 700 gramos. En el cordón umbilical una de las arterias sigue siendo más fina que la otra pero ha evolucionado con respecto a la ecografía de la semana 20 y ya no se percibe tanta diferencia de tamaño entre ellas. No obstante nos ha vuelto a citar, dentro de un mes, para confirmar que todo sigue evolucionando así de bien.
Inevitablemente cuando estamos embarazadas cualquier pequeña cosita que se sale de "lo normal" nos pone nerviosas pues amamos a nuestros hijos desde que nos enteramos de que están en nuestro interior y lo que deseamos es que todo vaya bien y que estén sanos.
Por suerte la ciencia y la medicina han evolucionado muchísimo con respecto a la época de nuestros abuelos, incluso de nuestros padres y ahora se hacen unos seguimientos muy exhaustivos que ayudan a un desarrollo óptimo del embarazo y también a detectar precozmente cualquier tipo de anomalía.
El 18 de diciembre tenemos la siguiente ecografía, esperemos que todo siga igual de bien y empecemos la Navidad con nuevas buenas noticias de nuestro frutito en camino.