De madre a madre. ¡Felicidades mamá!


Ahora que soy madre te entiendo mejor, ahora que soy madre comprendo a la perfección tu entrega, tu apoyo incondicional, tus preocupaciones, tus ilusiones... ahora que soy madre te sé leer, ahora sé lo que sientes, ahora quiero ser más tú que nunca. Eres mi modelo a seguir, esa persona en la que me quiero ver reflejada y a la que intento parecerme cada día más, aún sabiendo que jamás podré igualarte.


Madre no es la que pare, madre es la que cría, madre es la que cuida, madre es la que educa, madre es la que mima, madre es la que enseña, madre es esa que siempre está ahí, que apoya sin fisuras, que ve nuestros errores, que intenta corregirlos pero que nos acepta y nos ama con ellos. Tú mi querida mamá eres madre con mayúsculas, nunca me has fallado, siempre que te he necesitado has estado y a pesar de la distancia en cada paso que doy, siento tu mano.


Hace poco haciendo limpieza en el trastero, ese trastero en lo que todo entra y nada sale, apareció mi primer diario, uno que me regalaron para mi comunión de esos con una muñeca vestida de comunión en la portada. Me imagino que lo recordarás y también que a raíz de ese regalo empecé a escribir mi primer diario, el primero de muchos que durante muchos años he ido escribiendo para desahogarme no sé si con la intención de volverlos a leer en el futuro o simplemente de soltar lo que se me pasaba por la cabeza, de poner en orden mis pensamientos, o con la idea de que nunca muriesen mis recuerdos. Lo abrí y empecé a leer algunas hojas sueltas, pensamientos desordenados de una niña de 10 años y de repente me encontré con el día de tu cumpleaños. En esa hoja queda plasmado lo mucho que siempre te he querido y admirado, para mí siempre fuiste, eres y serás la mejor madre de todas, como pone ahí la mejor madre que se puede soñar.


Me pareció bonito recuperar esta hoja del diario escrita hace ya tantos años, este escrito donde plasmé mis sentimientos de una niña de 10 años, letras que expresaban lo que has sido siempre para mí. Letras que volvería a escribir hoy y letras que sé que repetiría dentro de otros 24 años. 

Soy una afortunada por muchas cosas, pero mi mayor fortuna (exceptuando a mis frutitos) eres tú, tú y papá. Mis pilares, los responsables de que sea hoy lo que soy, los causantes de mi felicidad. Gracias por amarme incondicionalmente pero también por enseñarme a luchar por mis sueños, a trabajar duro para conseguir mis metas, a no rendirme, a levantarme tras una caída, a ser fuerte, valiente, independiente, a perseguir mis ilusiones. Gracias por permitirme soñar y a la vez ayudarme a mantener los pies en la tierra, por ayudarme a encontrar el equilibrio que me hace feliz. Tengo tanto que agradeceros que necesitaría una vida entera para hacerlo. 


Hoy es el día de las madres, tu día y ahora también el mío. No soy mucho de "días de" eso ya lo sabes... pero hoy tenía la necesidad de decirte, una vez más, (hace poco te dediqué otro post "Mamá, casi una decada después, lo reconzco") lo que sé que sabes, que te amo, que te amo muchísimo, que a pesar de la distancia siempre estás conmigo, siempre estás presente en mi vida y que eres el espejo en el que intento reflejarme como madre, porque en eso no hay quien te gane.

¡Felicidades mamá! Aprovecho para felicitar a todas las madres ¡Feliz día de la madre!