¿A mí no me dices amor? u otra forma de decir celos


El Melocotón tenía 3 años y 3 meses cuando llegó la Manzanita, pero el concepto "celos entre hermanos" ya me empezó a sonar bastante antes de que naciera la frutita. Cuando estaba embarazada todo el mundo decía aquello de "Cuidado con el niño cuando llegue su hermana, está tan acostumbrado a ser el único y está tan "mimadito", tan pegado a ti, aún tomando el pecho (os recuerdo el post "Amamantar por placer no por obligación" donde os contaba como pensé en una lactancia mixta, pero que finalmente lo descarté) que tiene muchas papeletas de ser el típico niño que se pone celoso". Incluso en las clases pre-parto la matrona nos alertaba a las que nos convertiríamos en madre reincidente que con la llegada del nuevo bebé el hermano podría mostrar celos y para evitarlos nos daba algunas pautas:

- Que fuésemos los padres los que diéramos la noticia al hijo/a de que va a llegar un nuevo hermanito/a que está en la tripita de mamá y que él se va a convertir en el mayor y lo tendrá que cuidar y proteger.

- Que le hiciéramos partícipe en la decoración de la habitación, la cuna, la compra de ropita, juguetes o productos para el bebé.

- Antes de que nos fuésemos al hospital despedirnos del niño/a y explicarle que vamos a buscar al bebé.

- Al llegar a casa que le preguntásemos lo que hizo durante nuestra ausencia.

- Una vez que el bebé estuviese en casa, que lo involucrásemos desde el principio en el cuidado del bebé, para hacerle sentir una figura imprescindible para su hermano/a.

- Que no dejásemos de hacer con ellos las actividades que solíamos hacer en pro del nuevo miembro y rompamos sus hábitos y costumbres.

- Que avisáramos a familiares y amigos para que no se excedan en sus halagos hacia el bebé y le presten también atención al mayor.  Si le traían algún detalle que no se lo diesen delante del él/ella... 

A pesar de todo ello y tener la teoría bastante clara, a la hora de la verdad fue complicado y aunque intentamos cumplir todas las pautas y llevar a cabo todas las recomendaciones que nos dieron, siempre hay momentos en los que no estás y pienso que el Melocotón se pudo sentir desplazado y quizás sintió "celos". Aunque es algo que no puedo asegurar, porque aunque eso haya sido así, mi frutito nunca nos lo ha demostrado claramente, ni por supuesto nos lo ha expresado, cosa que tampoco esperaba, pues se caracteriza por ser bastante reservado a la hora de compartir sus propios sentimientos (no en cambio para contar otras cosas que hace, que él no considera tan íntimas, esto es algo que no me gusta pues me da miedo de que en algún momento tenga algún problema y al no compartirlo se haga fuerte en él y le llegue a afectar).

A veces mi Melocotón, como todos los niños, tiene momentos de rabietas y mi buenamadre lo achaca a que son celos encubiertos, que es su forma de expresarlo, aunque adora a su hermana y la cuida y la protege y está más pendiente de ella que nosotros mismos cuando estamos en la calle. Sinceramente yo no lo creo, pues en ningún momento me ha dado muestras de tener celos hacia su hermana, todo lo contrario se desvive por ella, yo creo que sí son llamadas de atención pero no tanto de celos hacia su hermana como de volver a reclamar atención sobre él, que a medida que va creciendo no nos necesita tanto y con esas rabietas lo que requiere es que volvamos a estar un "poco" más con él. La frutita ya tiene 3 años y ha empezado a pasar desde hace 2-3 meses a esta parte, luego no creo que sea así pues habría empezado a pasar con anterioridad.


La que por el contrario sí ha hecho alusión directa a esos posibles "celos" entre hermanos es la Manzanita, que cada vez que le digo a su hermano "amor" sale de no sé donde y me dice "¿A mí no me dices amor?" y cuando se lo digo me dice rápidamente ya no que no me lo has dicho primero. Al igual que lo de "amor", "cariño" o "te quiero". Aunque ella verbaliza esos "supuestos celos" haciendo estos comentarios, su actitud no demuestra esto, pues de momento nunca ha tenido rabietas, es bastante obediente, no pretende llamar nuestra atención sobremanera cuando estamos con su hermano... etc. 

A raíz de estos comentarios de mi frutita, he pensado sobre el tema de los celos del hermano menor al mayor, y creo que es algo que se puede dar fácilmente pues si intentamos no romper las costumbres y dedicar el mismo tiempo que antes del bebé al mayor, al final nos quedamos sin tiempo para dedicarle al nuevo y esta costumbre se puede extender en el tiempo y que se asimile como lo normal en el hogar y desemboque en que el "gran olvidado" pase a ser el pequeño. ¿Qué opinas sobre ello?  ¿Crees que por intentar que el mayor no tenga celos del pequeño, esto puede volverse en contra y sea éste quién termine teniendo celos del mayor?